80/100
20 de septiembre de 2024
HFMN Crew / Contra Records
Tercer disco de la banda catalana, una de las más prometedoras y potentes que hay en la actualidad y que están dentro de la escudería de HFMN. Su punk es deudor del londinense de los 70, pero perfectamente adaptado a los tiempos que corren. Y ese es el gran logro de un grupo barcelonés con cantante madrileño, que define perfectamente lo que es el punk más genuino en un mundo actual. Seguimos instalados en los postulados primigenios que han hecho grande a esta banda y que le permiten girar por toda la piel de toro. Esperábamos esto de ellos… y nos encanta.
El bajo de Rau nos adentra en la inicial “Mundo invisible”, tema ideal para demostrarte que el grupo sigue fiel a sus postulados y que, musicalmente, dan un paso adelante a pesar de lo continuista de la propuesta. Hay dejes de post punk aquí, especialmente en el tratamiento de las guitarras y el tema en general, pero el estribillo es visceral y directo, con un punto hímnico. “Las fotos mienten” es un tema más festivo a la vez que crítico con las redes sociales actuales. Disparan con bala ante el panorama de una realidad ficticia a la que nos vemos abocados. Gran letra para un tema directo a la vez que incisivo.
Una de las que más me han convencido, sino la que más, es “La Inquisición”. Básica, directa y con ese bajo de Rau dando la entrada para que Rubén escupa unas letras crudas. Punk callejero de toda la vida por bandera, e himno reivindicativo y dotado de un muy buen solo de guitarra por parte de Àlex Montoro. Esta va a caer en sus directos sí o sí, y, curiosamente, es un tema que llegó tarde y que estuvo a punto de no ser ni incluido en el disco. Uno de los singles ha sido “Cien colores”, un canto a la unión con los dejes del estilo presentes y mucha mala leche a la vez que en musicalidad.
A nivel de letras son directos, pero canciones como “Sombra y luz” me llegan a recordar al gran Yosi de Los Suaves, pues el grupo cuida especialmente el mensaje, y el rollito callejero y la tonalidad de Rubén es cercana al genio de Ourense. La gracia de este vocalista es que es capaz de rasgar sus cuerdas vocales y se acerca a los growls con estilazo. “Pertenecemos a la guerra y al infierno”, inmejorable inicio para disfrutar de “Otra manera”. Himno de hermandad, bajo en la primera línea y con Willy manteniendo el pulso a la batería.
“Aplasta la bestia” es de esos temas para ser cantados en directo hermanado con la sala. Letra ceniza y oscuridad con estribillo positivista e hímnico. Pogo y rabia escupidos con voces distorsionadas siendo pura diversión. “La flor” posee letras con aires de poema castellano y nos hace disfrutar en sobremanera. Tema para que cante la gente y se deje las cuerdas vocales en ello. Aquí Rubén se deja la cuerdas voz en un tema realmente exigente en lo vocal.
“Agosto” cumple los cánones sin más. Tema deudor del disco y destinado al completismo, incluso por la letra. Es de lo más predecible del disco… Finalizan con los acordes mayores de “Nadie” y una letra punzante y directa a la vez que el groove acompaña. Es como si ya lo que querían decir ya estaba firmado con las anteriores.
Nadie espera a la Inquisición española… mítica frase de los Monty Python que les va a perseguir toda la vida. Este Mundo invisible es un reflejo de los tiempos y lo que debe hacer una banda de punk nacional para conseguir la trascendencia. No hay grandes inventos ni cambios, pero tampoco eran esperados. Os traeremos una bonita entrevista con ellos y celebraremos que existan en pleno 2024 bandas combativas y frescas que hagan que su música te lleve al fango y a dejarte piel y garganta. Quizá estemos ante el disco menos local y más global de los tres, y eso siempre es un paso importante.

Licenciado en INEF y Humanidades, redactor en Popular 1, miembro fundador de TheMetalCircus y exredactor en webs y revistas como Metal Hammer, Batería Total, Guitarra Total y Science of Noise. Escribió el libro «Shock Rock: Sexo, violencia y teatro». Coleccionista de discos, películas y libros. Abierto de mente hacia la música y todas sus formas, pero con especial predilección por todas las ramas del rock. Disfruto también con el mero hecho de escribir.
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