Cine Rockero: “What’s Up Tiger Lily?”

Director: Senkichi Taniguchi / Woody Allen

Productor: Toho / Benedict Pictures Corp.

Año: 1966

Para quien suscribe estas líneas Woody Allen es un genio absoluto, pero el autor de “Manhattan” y “Annie Hall” posee unos inicios que, aunque poco conocidos y lejos de las magnas obras, tienen ese encanto maravilloso. Sus primeros monólogos, guiones y artículos periodísticos son impagables, pero toca reivindicar una de sus geniales gamberradas primerizas que tomó por título “What’s Up Tiger Lily?” Aunque en España es conocida por “Lily la tigresa” o por el horripilante título “Woody Allen el nº1”. Dicho título está a la altura de la traducción francesa de “El dormilón”, allí rebautizada como “Woody Allen y los robots. No es de extrañar que el sr. Allen optara por reservarse el derecho de titular sus propias películas como él quisiera en países de habla no inglesa.

 

El caso es que para esta película Allen compró los derechos de una infumable película japonesa titulada “Kagi No Kag”, cruce bastardo de peli James Bond de tercera categoría con algo del género de japos-que-saltan-y se-meten-leña-por-turnos, ya sabéis, esas que los malos nunca les da por ir todos a por el prota del film y matarlo definitivamente. El caso es que el judío más célebre de Nueva York quedó con unos colegas, eliminaron el audio del film y lo fusilaron con tonterías y diálogos absurdos. También eliminaron la banda sonora y metieron a The Lovin’ Spoonful, banda de rock a lo Beatles que aparece en la película, además de secuencias de otros films ajenos a éste. Parece ser que Allen estuvo en contra de incluir metraje ajeno y decidió desentenderse definitivamente del proyecto.

 

El resultado es un encadenamiento de gags surrealista a más no poder, a caballo de una trama más absurda aún si cabe. El protagonista Terri Saki (Urrutikoechea en la versión hispana) debe conseguir la receta de una ensalada de huevo que está en manos del malvado de turno, que cuenta con un barco casino con bellas mujeres y con unos secuaces malvados. A destacar el afeminado “Sandokán” vestido de butano, uno de los puntos fuertes del film.

 

No es una película que haya sobrevivido excesivamente bien al paso del tiempo y más sabiendo que hubo un tiempo en el que el recurso de doblar con tonterías y vocecitas ha sido un recurso muy utilizado. El Informal (Tele 5) o Alguna pregunta més (TV3) son programas que se han basado en esta técnica, pero hay que reconocer que el primero que lo hizo, el genio que tuvo la idea primigenia, fue Woody Allen.

 

Hay gags excepcionales como cuando en plena seducción Suki Yaki le pregunta al protagonista si puede recitar los reyes godos, el célebre gag de las ratas en el barco realizado con pause-rew-pause-play o los secuaces navegando en barca cantando el himno de Asturias. En el DVD hay la versión española y la internacional. Evidentemente la internacional subtitulada es muy superior, especialmente en calidad de visión, pero la española no deja de ser curiosa, divertida, y con el tiempo se ha hecho de obligatorio visionado y ha conseguido cierta aura de peli de culto.

 

El director de la película original se ve que pilló un rebote antológico al ver el resultado final y la criatura creada por Allen, pero gracias a ello su película de escasa repercusión, en su versión original, es ya todo un clásico de culto para miles de frikis. Y es que hubo un tiempo en que Woody Allen era una especie de Rey Midas, y todo lo que tocaba se convertía en oro. A pesar de que hoy en día las películas del maestro están a años luz de sus obras maestras, es una bendición que a la edad que tiene siga haciendo cine por puro placer.  Y ojo que parece ser que la próxima película será rodada en Barcelona…

 

 

 

 


Descubre más desde Stairway to Rock

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

Deja una respuesta