Oh Dios… de eso hace ya mucho tiempo. Es que cuando yo era pequeña no tenía una paga, o si más no, no podía comprar nada que no fuera música. Yo tenía un hermano seis años mayor que yo y él sí tenía una paga asignada. Yo tendría cuatro. Cinco años y dije que quería tener mi propio dinero, que por qué él tenía una paga y yo no. Yo quería comprarme cosas que me gustaran.
Mis padres accedieron, pero con la condición de que sólo me lo podía gastar en música, por lo que cada fin de semana íbamos a la tienda de discos donde podía comprarme casetes. En esos tiempos yo estaba viviendo en Indonesia con mis padres y cada finde llegaba a casa con dos o tres casetes.
El primero que compramos fue la banda sonora de La guerra de los mundos, pero pertenecía a un lote y fue por la insistencia de mi hermano, que lo quería comprar. Era una música muy de miedo. Me daba mucho miedo esa música y me recuerdo arrastrarme hacia la cama porque me parecía una música muy peligrosa, aunque luego me encantó.
Y te diría que me llegó a inspira mucho para Within Temptation. Pero debería reconocerte que mi primer amor absoluto hacia la música vino de una banda sonora que poco tiene que ver con el rock: Grease. Yo tendría cuatro o cinco años cuando vi la película, y de verdad que no había escuchado a nadie cantar como lo hacía Olivia Newton John. Me parecía un ángel.
Y yo me decía: “Dios mío: yo quiero ser como ella y cantar como ella” y empecé a intentar cantar con el micro de una grabadora en la que me grababa a mí misma cantando. Era muy pequeña, pero ya cantaba todas esas canciones de la banda sonora para luego escucharme. Era muy temprana edad, pero es lo que hacía entonces…
Licenciado en INEF y Humanidades, redactor en Popular 1, miembro fundador de TheMetalCircus y exredactor en webs y revistas como Metal Hammer, Batería Total, Guitarra Total y Science of Noise. Escribió el libro «Shock Rock: Sexo, violencia y teatro». Coleccionista de discos, películas y libros. Abierto de mente hacia la música y todas sus formas, pero con especial predilección por todas las ramas del rock. Disfruto también con el mero hecho de escribir.