Warcry (2002)
El debut de Warcry fue más que un disco: una declaración de intenciones. Aunque no fue el primer álbum que descubrí, es una obra que ha dejado una huella imborrable en su discografía.
- Luz del Norte: Una metáfora bellísima que explora la sensación de estar fuera de lugar. Aunque habla de distancia física, resuena en muchos niveles emocionales.
- Cada vez: Una declaración de amor simple, directa y preciosa, que no necesita más para transmitirlo todo.
- Trono del Metal: Rompe la temática habitual de la banda con un himno de hermandad que en los conciertos resuena como un estandarte del metal.
- Hoy gano yo: Un canto a la superación y al optimismo. No es mi tema de cabecera, pero tiene su lugar en momentos de reflexión.
- Nana: Con una inspiración en el folklore celta, esta pieza es pura emoción. La historia de un guerrero que acepta su destino conmueve desde la primera nota. Quién no se la sabe de memoria…
El Sello de los Tiempos (2002)
Un año después, Víctor García volvió a sorprendernos con un álbum que para mí encabeza el podio. Las historias y emociones aquí son simplemente insuperables.
- Alejandro: La historia de Alejandro Magno se convierte en un relato épico que rinde homenaje a la lealtad y el trabajo en equipo.
- Capitán Lawrence: Inspirada en la historia real del Capitán Oates, esta canción es un viaje emocional que mezcla amor, pérdida y sacrificio.
- Tú Mismo: Mi himno personal. Un canto a la vida, la superación y a encontrar luz en la adversidad. Ha sido mi salvavidas en muchas ocasiones.
- Un mar de estrellas: Una historia de amor trágica, narrada con una musicalidad sublime. El teclado, el solo de guitarra y la narrativa hacen de este tema una joya.
Alea Jacta Est (2004)
Aunque para mí este disco no alcanza el nivel de los dos primeros, tiene sus momentos destacados:
- El guardián de Troya: Basada en uno de los momentos históricos más icónicos, su intensidad merece reconocimiento.
- Espíritu de amor: A pesar de su temática de desamor, tiene una belleza romántica que la hace inolvidable.
Dónde está la luz (2005)
Con este álbum, Warcry recuperó fuerza, y es mi segundo favorito. Las emociones aquí son profundas y devastadoras.
- Nuevo Mundo: Usando como marco la inmigración, describe lo desgarrador de dejar todo atrás y enfrentarse a lo desconocido.
- El amor de una madre: Una de las historias más impactantes, cuenta el difícil acto de una madre que decide liberar a su hijo del sufrimiento.
- Contra el viento: Otro canto a la superación, pero con su propia identidad. A pesar de su temática recurrente, logra destacar.
La Quinta Esencia (2006)
Aquí comienza una etapa menos inspirada, aunque hay canciones que se salvan:
- Tu recuerdo me bastará: Una de las mejores canciones de desamor de Warcry. Te rompe en dos.
- El más triste adiós: Sigue esa línea melancólica, aunque no llega al nivel de la anterior.
- La vieja guardia: Un tema hímnico que rescata el espíritu metalero de la banda.
Revolución (2008)
Un álbum que no logró destacar demasiado y no entiendo por qué, la banda estaba en un buen momento. De entre todas, una joya:
- La vida en un beso: Una canción sencilla pero hermosa, con un toque especial que la hace brillar en un disco discreto.
Alfa (2011)
Este disco marcó una recuperación para la banda, con temas que recuerdan a sus orígenes.
- Alma de conquistador: Un tema directo y potente, con un estribillo que se queda grabado.
- Cobarde: Una pieza dura que aborda la violencia de género con una narrativa cruda y conmovedora.
- Ardo por dentro: Destaca por su energía y un solo de guitarra que es pura magia.
Inmortal (2013)
Aunque no es un mal disco, no logró conectar tanto conmigo. Rescato dos canciones:
- Quiero oírte: Con todo para ser un éxito, sigue siendo una de las más coreadas en los conciertos.
- Siempre: Una declaración de amor sencilla y directa, pero profundamente emotiva.
Donde el silencio se rompió (2017)
Una etapa más floja, pero con algún destello que mantiene la esencia de Warcry:
- Cielo e infierno: Un tema que logra capturar algo de la magia que define a la banda.
Daimon (2022)
No sé si es por mi momento vital, pero este disco no me recordó para nada a lo que Warcry me tenía acostumbrada. La crítica fue dispar en cuanto a este disco, que muestra a una banda que intenta reinventarse sin perder su esencia. Pero la verdad, no hay ningún tema que me encante tanto como para ponerlo.