Palabras mayores… Myles Kennedy nos presenta disco en solitario y hay oportunidad de entrevistarle para el Stairway to Rock. Si has seguido su trabajo al frente de Alter Bridge y de los discos con Slash, no puedes perderte sus trabajos en solitario ya que el chico se reivindica como guitarrista en formato trío, dando rienda suelta a lo que le apetece hacer en solitario. “The Art of Letting Go” es su tercer ejercicio en solitario y nuestro protagonista saca a relucir todas sus influencias a pesar de que también sabe que quienes le escuchen esperan de él un sonido marcado y una calidad.
Es una de esas entrevistas en las que hay mucho feeling y Myles aborda temas que no entraban en el guion como pueden ser sus gustos dentro del séptimo arte o lo que perpetraron sus amados Gojira en la reciente ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de París. El artista se nos desnuda y habla de su amor por Queen, su papel en la película Rock Star y realmente demuestra ser un tipo especialmente sensible que todavía no termina de digerir el estatus al que ha llegado.
Hola Myles, saludos desde Barcelona. Primero que todo, gracias por tu tiempo y felicidades por tu próximo nuevo disco “The Art of Letting Go”. Este es tu tercer álbum en solitario. Recuerdo tu primer álbum, “Year of the Tiger”, y creo que “The Art of Letting Go” es más rock y metal.
Sí, definitivamente. Siento que está más próximo al segundo, “Eyes of March”. Este es casi como el puente entre “Year of the Tiger” y “The Art of Letting Go”. Definitivamente hay más momentos de música electrificada en comparación con “Year of the Tiger”, que es una obra eminentemente acústica.
Parece como que necesitas tocar la guitarra eléctrica…
Sí, es cierto. En muchos sentidos, lo de sacar discos en solitario fue una excusa para tocar la guitarra eléctrica, porque a mí me encanta tocarla y quería hacer más solos. Soy un friki de la guitarra en el fondo. Ahí es donde comencé. Cantar siempre fue algo que utilicé para ayudarme a transmitir mis canciones, pero siempre me he considerado más un guitarrista. No quiero definirme más como un guitarrista que un vocalista, pero ciertamente ahí es donde comencé. Así que digamos que es algo que todavía me encanta hacer.
Es muy interesante tu trabajo con la guitarra porque la gente suele pensar que Myles Kennedy es un cantante increíble, pero también eres un guitarrista increíble.
Gracias, muchas gracias. Bueno, he pasado mucho tiempo tratando de mejorar, si puedo, y trabajo en ello. Digamos que es una salida muy terapéutica para mí. Simplemente tener una guitarra me hace sentir bien, y es un elixir maravilloso para lo que te aqueja en tu vida diaria.
Los primeros sencillos que ya han visto la luz son “Nothing More to Gain”, “Say What You Will” y “The Art of Letting Go”. ¿Estás contento con las opiniones de la prensa y los fans sobre las canciones?
Bueno, para ser totalmente honesto contigo, soy ese tipo de persona que nunca lee nada, ni comentarios ni prensa. Vivo en una completa burbuja. Mi mamá dijo que le gustó, así que eso es bueno. Tengo algunos amigos que se me acercaron para decir que les gustan las canciones, así que eso es bueno. Dejé de prestar atención a las opiniones de Internet hace años porque sentía que era mejor para mí creativamente.
Porque sentí que, si empezaba a prestar atención a lo que la gente decía, de alguna manera, eso afectaría en el proceso creativo. Podría volverme tal vez más consciente de mí mismo. La gente dice: «Oh, estás hablando de malas críticas«. Y yo digo: «No, en realidad las buenas críticas también me asustan porque entonces siento que hay un nivel que tienes que mantener y alcanzar«. Es un estado puro de olvido para mí.
No eres el único artista que prefiere no leer nada sobre las reacciones a sus nuevas canciones. Creo que es la opción más “sana”.
Para aquellos que somos sensibles, resulta algo crucial. Simplemente, no tengo la piel lo suficientemente gruesa para leer lo que hay en las redes sociales. Conozco a artistas que lo aman. Recuerdo haber hablado con alguien hace mucho tiempo… A este tipo le encanta leer todo lo que dicen de él. Le gustan también las malas críticas. Y yo digo: «tío, pues eres mejor que yo«. Realmente lo de “sanidad” que has dicho es un buen concepto (risas)
Me gustaría decirte que mi canción favorita es “Miss You When You Are Gone”. No sé si ya tienes claro tus próximos sencillos, pero creo que esta canción podría ser perfecta como avance.
Bueno, eso es bueno escuchar. De hecho, eso ayuda mucho. Muchas veces como compositor y artista, pierdes la perspectiva. Pero he escuchado lo suficiente el disco y sentí cuando estaba trabajando en esta canción que tenía potencial. Pero no estaba seguro si era lo suficientemente dura… A algunas personas les gustan las cosas más heavies y basadas en riffs. No es realmente una canción basada en riffs, pero, al menos, me hace sentir bien cuando la toco. Me alegra saber lo que opinas, es algo con lo que conecto.
Por cierto, dos canciones que me encantan son «Mr. Downside» y «How the Story Ends», la última.
¡Oh, genial! Muchas gracias. Una vez más, es bueno saberlo.
La siguiente pregunta es sobre el título del álbum. Cuéntame qué hay detrás de este título.
Estoy en una etapa de la vida en la que estoy tratando de aprender el arte de dejar que todo me importe poco. No ser reactivo, aprender a fluir con la corriente, adaptarme, dejarme llevar. Hay una canción, «The Art of Letting Go», con una línea que dice eso de: «Just Be Like Water», que es una frase de Bruce Lee.
Para mí, esa línea trata realmente sobre la adaptabilidad y de seguir el flujo, y eso se ha convertido en una parte crucial de mi existencia a medida que envejezco. Y encuentro que realmente me está ayudando a navegar por la vida de una manera mucho más sensata y saludable. Y dejar de intentar ir contra corriente, de luchar contra como son las cosas. Simplemente vivir el presente, ser agradecido y tratar de vivir desde ese enfoque en particular. Ojalá lo hubiera descubierto mucho antes, la verdad.
¿Tienes planes de hacer una gira y presentar este nuevo álbum?
Sí, saldremos a finales de octubre. Y vamos a Europa y al Reino Unido. Estaremos allí durante unas cinco o seis semanas.
Y cuando tocas en directo siempre hay algunas sorpresas… Tocas una versión muy especial de «The Trooper» de Iron Maiden.
¡Exacto! Sí, fue muy divertido el poder hacerlo. Estaba sentado en la litera una noche después de un show y pensé que el concierto necesitaba algo que la gente conociera, una canción que les resultara familiar, pero con un giro interesante. Y por alguna razón, esa canción me vino a la mente. Y es curioso, porque fue algo muy de última hora, una idea pasajera.
Pensé: “voy a intentarlo, a ver qué tal”, y la gente realmente conectó con ella. Parece que a la gente le gusta mucho pues es una canción maravillosa. Quiero decir, Iron Maiden es lo máximo, ¿no? Así que tocarla acústicamente y con un poco de percusión con el pie, resulta divertido. Es genial cuando la toco y la gente canta. Una pasada.
Y también tocas otra versión, «Traveling Riverside Blues» de Robert Johnson.
Sí, sí, la hacemos de vez en cuando. No la hemos tocado durante un tiempo largo. A mí me encanta Robert Johnson. Me encanta mucho el blues del Delta y demás. De verdad que me encanta Robert Johnson, me encanta también Son House, el blues rural, y me encanta Mississippi John Hurt… De hecho, hay una canción en «Year of the Tiger» llamada «Haunted by Design», que fue muy inspirada por Mississippi John Hurt. Así que sí, realmente me encanta esa música.
Volviendo atrás en el tiempo, ¿es cierto que recibiste una oferta para ser el cantante de Velvet Revolver?
Es cierto, me ofrecieron hacer una audición. Lo que sucedió fue que Slash se me acercó en 2002 y me envió una demo para que le pusiera voz. Pasé unas dos semanas con ella, y yo estaba en un punto muy extraño de mi vida. Piensa que acababa de terminar con The Mayfield Four. Pasamos cinco años en Epic Records, y estaba muy desilusionado con la industria en general. No sabía si quería seguir siendo un artista que grababa discos.
Así que, respetuosamente, decliné esa oferta. Nunca devolví la demo cantada y les dije que estaba profundamente halagado, pero qué no. Como uno de los mayores fans de Guns N’ Roses, no podía creer que se hubieran puesto en contacto conmigo, pero sentí que no sería sincero si intentaba entrar en el grupo en ese momento. Simplemente no estaba listo y necesitaba algo más de tiempo para averiguar hacia dónde dirigía mis pasos.
Por otro lado, finalmente decidiste aceptar la oferta de Alter Bridge. Gran decisión, por cierto. ¿Podemos decir que tu vida cambió una vez que te uniste a la banda?
Sí, cuando Alter Bridge se puso en contacto, fue alrededor de un año y medio después de la oferta de Velvet Revolver. Mark Tremonti se acercó y yo ya había resuelto algunas cosas y me sentía un poco más seguro de mí mismo. Estaba listo para volver a la carga, ¿sabes? Pero incluso, en ese momento, no fue algo muy inmediato. Me llevó tiempo sentirme realmente cómodo. Creo que fue porque estaba un poco traumatizado después de los cinco años que pasé haciendo los dos discos con The Mayfield Four. Estaba hablando de esto mismo con alguien el otro día…
Creo que hubo una cantidad considerable de auto-cuestionamiento porque estoy muy orgulloso de esos discos. Y aprendí que no se trata solo de la música que haces, que hay mucho más, como la parte comercial que no entendía. Pero en su momento me lo tomé de manera personal, ahora lo veo diferente… Había otras partes de la ecuación que no comprendía. Así que, ya sabes, tómatelo todo con calma. Pero lo que pasó fue que interioricé mucho de eso y me culpé a mí mismo.
Así que cuando entré en el rol de cantante en Alter Bridge, todavía tenía que lidiar con algunos de esos problemas. Me tomó tiempo llegar a un punto donde realmente me sentía listo para dar el sí y dar ese paso de “¡hagámoslo!”. Y 20 años después, creo que lo he entendido todo, o eso espero.
El pasado abril, terminaste la gira de The River Is Rising tocando con Slash. Supongo que para ti tocar con Slash es algo increíble. Dijiste antes que eres uno de los mayores fans de Guns N’ Roses que existen…
Sí, es totalmente surrealista. Aún hay noches cuando estamos tocando, que miro a un lado y a otro y pienso, ese es Slash. Sabes, es fascinante cómo ha transcurrido mi vida y estoy muy agradecido por ella. Pero lo más hermoso de toda esa experiencia no ha sido solo el escucharlo tocar a mi lado, sino que simplemente le adoro.
Es un ser humano increíble. Así que pasar tiempo con él y absorber su energía ha sido algo muy positivo para mí. He aprendido mucho de él. He aprendido mucho sobre su ética de trabajo, que la suya es increíble. Y creo que eso me ha ayudado mucho. Esa capacidad de mantenerse centrado… Es muy inspirador.
Pero algo que es increíble es que cuando empezaste a tocar con Slash, obviamente la gente quería escuchar canciones de Guns N’ Roses. Pero hoy en día, solo hay dos canciones de los Guns en vuestros set-lists. Todo lo demás es material propio, de este nuevo período. Y las salas son de gran capacidad, no tocáis en clubes precisamente. Conseguir es no es nada fácil. Así que felicidades.
Gracias. De hecho, es todo muy curioso. En esta última gira hablábamos de eso mismo, es cuando nos dimos cuenta y dijimos:” wow”, ¿sabes? Porque al principio la gente solo quería escuchar las canciones de Guns N’ Roses, lo cual entiendo porque son canciones icónicas. Pero sí, 15 años después, hemos sacado todos estos discos juntos y ahora la gente canta nuestras canciones, se emociona, se emocionan tanto con “Anastasia” como con estas canciones más icónicas que hemos compuesto, y esto es realmente hermoso.
No sé ni cómo articularlo más allá de la gratitud. Porque experimentar eso te hace sentir que todo el tiempo que dedicaste a escribir las canciones valió la pena. Te hace sentir que realmente hemos trabajamos duro en ello. Y ahora a la gente le importa, y es genial.
¿Cómo eliges las canciones de Guns N’ Roses en el setlist? Porque sólo hay dos. ¿Quién decide cuáles entran?
Sí, esas las decide Slash. Él toma esa decisión. Y lo bueno es que, aunque me encantaba cantar esas canciones en su momento, Todd Kearns es tan bueno… Él les da su toque y las interpreta brillantemente. Ha sido muy divertido para mí dar un paso atrás y ver a ese tipo cantando. Tiene un talento enorme.
Sé que eres fan de Gojira. ¿Viste lo que hicieron en la apertura de los Juegos en París?
Fue increíble. Me enteré porque mi cuñado se acercó y le dijo a Celine, mi esposa: «¿Sabes que Gojira está tocando?» No lo podía creer… Así que nos pusimos frente a la pantalla porque a ella también le encanta Gojira. Para mí, fue increíble, no tengo palabras para expresar lo orgulloso que estoy de esos chicos.
Recuerdo, curiosamente, la primera vez que los escuché en 2011 en un festival en España. Era tarde, ya de noche, y recuerdo que había muchas bandas tocando en diferentes carpas, pero había un grupo en particular sonando, y pensé, ¿qué es eso? Salí del camerino, estábamos con Slash, y probablemente en una de las primeras giras, y fui como un zombi tratando de encontrar de dónde venía ese sonido.
Finalmente, salí y vi una carpa, que no era enorme precisamente, pero lo suficientemente grande, y la gente estaba enloqueciendo. Me pregunté, “¿quién es esta banda? ¿Qué es esto?” Desde ese momento quedé completamente enganchado a Gojira. Así que verlos ahora en este gran evento mainstream, y arrasando… pues creo que cada fan del metal se sintió muy orgulloso. ¿Cómo no podemos estarlo? ¿Qué te pareció a ti?
Sí, fue increíble porque no fue un show en el estadio, sino en el río Sena. Fue asombroso. Y todo mezclado con la historia francesa junto con la música. Fue realmente brillante.
Perdón por mi perro, ese es Mozart. ¡Ey, Mozart, te toca callar!
En 2001 apareciste en la película «Rock Star». La vi hace años. Recuerdo el film bastante bien… ¿Fue algo especial para ti? Es tu única película.
Sí, fue la única película en la que probablemente aparezca, porque me di cuenta de que los actores se levantan muy temprano. Pero fue genial, fue una gran experiencia. Fue una de esas cosas donde simplemente ya estaba feliz de estar allí. La gente me dice: «Oh, me gustó tu actuación en Rock Star«. Y yo pienso: “bueno, en realidad no estaba ni actuando”. La exuberancia que ves y la emoción en mi rostro era simplemente yo, no podía creer que estuviese en Hollywood haciendo una película con actores.
Y ahí estaba Zakk Wylde y Jason Bonham. Para mí, fue totalmente surrealista y muy divertido. Y lo curioso es que no tenía idea de la longevidad que iba a tener esa película, o como el seguimiento de la misma iba a continuar en el tiempo. Es una peli de culto. 20 años después, la gente todavía habla sobre ella. Pensé que simplemente pasaría y eso sería todo. Y me equivoqué.
Es una película extraña porque se basaba en la historia de Tim «Ripper» Owens cuando entra en Judas Priest, pero al final cambiaron la historia. Pero las canciones son realmente buenas. Allí están Jeff Scott Soto y otro cantante que adoro, Mike Matijevic, ambos son increíbles.
Ambos son grandes cantantes de rock. Y sí, el nivel de talento en esas canciones, el cómo fueron escritas e interpretadas… es totalmente legítimo.
¿No tienes planes de trabajar en otra película, entonces?
No, a menos que un día me llamen y quieran hacer, no sé… dentro de 20 años, «Steel Dragon» en una residencia de ancianos, jugando al ajedrez y rockeando de vez en cuando (Risas)
¿Puedo preguntarte cuál es tu tipo de películas favoritas?
Buena pregunta. Me encanta el cine, y acabo de volver de ver una película, y esto se relaciona con «Rockstar», pero digamos que Paul Thomas Anderson es uno de mis directores favoritos. La primera vez que vi una de sus películas fue «Boogie Nights». Fue divertido, porque una de las cosas buenas de estar en el set fue poder decirle a Mark Wahlberg lo increíble que fue su actuación en «Boogie Nights».
Y, años después, sigo siendo un gran fan de su trabajo. Me encanta también lo que hace con Daniel Day-Lewis y cómo aprovecha a Johnny Greenwood para las bandas sonoras. La realización cinematográfica de alta calidad es algo que, a medida que pasa el tiempo, me interesa cada vez más porque es muy inspirador. El compromiso que estos tipos tienen para hacer estas películas, como Daniel Day-Lewis y su entrega en cada papel, es, para mí, impresionante. Eso es arte. Es increíble…
«En el nombre del padre» es una película asombrosa…
¡La volví a ver recientemente! Fue la primera vez que lo vi actuar, allá por los 90, y quedé impresionado. Es un actor increíble.
¿Puedo pedirte tu opinión sobre la banda Creed y Scott Stapp como cantante?
Recuerdo cuando giramos juntos con The Mayfield Four, me impresionó ver su habilidad para conectar con el público. Eso era algo muy evidente, la relación que establecía durante esos shows y el por qué funcionaban. No me sorprendió ver cómo Creed llegaron a ser una de las bandas más grandes, al menos en Estados Unidos, dentro del rock ‘n roll. No solo Scott, toda la banda tenía las canciones que conectaban con la gente, y lo que él tiene como intérprete es algo que llega con muchas personas, y eso es muy importante.
Por cierto, Creed está viviendo una reunificación y les está yendo muy bien.
Sí, es algo enorme.
¿Crees que será algo por un corto período de tiempo o no sabes cómo marchará la cosa?
Para ser honesto, no lo sé. Pero dado lo exitoso que ha sido aquí en Estado Unidos, creo que podría seguir adelante, y deberían hacerlo. Al final de todo, si estás haciendo feliz a la gente, sigue haciéndolo… Eso es lo que realmente importa.
Dos preguntas más: ¿Cuál es el truco que siempre quisiste hacer en el escenario, pero nunca lograste? ¿Lanzar láseres o algo así?
Me encantaría hacer un salto mortal hacia atrás desde la tarima de la batería, pero creo que a mi edad eso terminaría con un tobillo roto. Así que dudo que nadie quiera ver eso. En cuanto a algo pirotécnico, pues me encantaría hacer algo realmente divertido.
Recuerdo haber visto a Rush en la gira de «Presto» hace más de 30 años, y me encantó cómo tenían al gran conejo que salía del sombrero. Me gustaría hacer algo así, algo un poco en broma, pero a gran escala, donde gastas mucho dinero de producción en una cosa que la gente recordará 35 años después, diciendo: «Y entonces, el conejo salió del sombrero«. Así que me gustaría hacer algo como eso. No sé qué podremos hacer en un futuro.
¿Cuál es el primer álbum que compraste con tu propio dinero?
El primer álbum que compré con mi propio dinero fue «News of the World» de Queen. Ese fue el primero. Ahorré mi paga del mes, fui a un lugar llamado Kmart y pensé: «Tengo que tenerlo, es que tengo que tenerlo«. Y así empezó todo.
Queen es una de las bandas de mi vida. Es un álbum realmente bueno. Bien, Myles. Un final perfecto. Ha sido un placer.. Te he visto muchas veces en el escenario y espero verte pronto otra vez. Tal vez en solitario, tal vez con Alter Bridge o con Slash, pero siempre es un placer verte.
¡Genial! Aprecio tu tiempo, Jordi. He disfrutado mucho la entrevista. Así que nos vemos en la carretera.
Licenciado en INEF y Humanidades, redactor en Popular 1, miembro fundador de TheMetalCircus y exredactor en webs y revistas como Metal Hammer, Batería Total, Guitarra Total y Science of Noise. Escribió el libro «Shock Rock: Sexo, violencia y teatro». Coleccionista de discos, películas y libros. Abierto de mente hacia la música y todas sus formas, pero con especial predilección por todas las ramas del rock. Disfruto también con el mero hecho de escribir.